«EL DÍA QUE RUBALCABA SUDÓ LA CAMISETA», POR ANTONI GUTIÉRREZ-RUBÍ.

noviembre 10, 2013

 

Rubalcaba ha echado el resto. Absolutamente. El sudor que poco a poco se ha apoderado de su cuello y de su rostro, hasta manchar su camisa, no solo es el síntoma del inoportuno proceso gripal que padece, sino el reflejo de un esfuerzo pasional −y políticamente febril− en su intervención. Una pasión casi inédita. Con uñas y dientes, como ya dijo en su anterior campaña. Dice que el PSOE ha vuelto. Pero él también. Ha vuelto. Y los que le quieren asignar un papel en la historia, deberán competir con él por el futuro. No hay duda.

El discurso de Rubalcaba ha culminado una exitosa Conferencia Política. Ha dejado muestras y trazos de modernidad y actualización estética y de estilos. Y, también, programáticas de gran calado. Atención a las conclusiones de la Comisión de Economía y a la batería de medidas contra las desigualdades, en especial sobre las diferencias salariales.

El discurso ha tenido momentos de gran intensidad. Como cuando ha interpelado a los varones poniéndoles como sujetos de las discriminaciones que reciben, históricamente, las mujeres en su vida laboral o personal. «¿Cómo os sentiríais compañeros si os pasara a vosotros?». Ha sido un buen recurso, auténtico, que centra la idea del feminismo político en la igualdad sin concesiones y que implica a los hombres −y a todos los socialistas− en esta causa. «Ser socialista en el siglo XXI es ser feminista y ecologista», ha afirmado. La emoción que transmitía era sincera y personal. Ha sido como un reencuentro, también personal, con los valores que, abandonados, olvidados o hechos jirones por el pragmatismo, dejaron al PSOE sin alma y sin proyecto. Volver a ser sensibles. Volver a ser socialistas, ha repetido, insistentemente.

Rubalcaba se ha rebelado contra los que asimilan PP y PSOE como lo mismo, contra los que hablan de PPSOE. Es la crítica que más le duele, la que le iguala, la que le homogeniza con la derecha. Por eso, durante todo el discurso, ha insistido en defender claramente las diferencias ideológicas, de comportamiento y de propuestas. «Para crecer, no importa crear desigualdades, piensa y hace el PP. Nosotros lo contrario: crecer generando igualdad».

Rubalcaba ha reivindicado el orgullo socialista. El de un partido de más de 130 años y con 4.000 agrupaciones. Pero, sinceramente, no parece que la reivindicación del pasado sea nostálgica o acomodada. La agenda de cambios que ha presentado es tan importante como la de estilos y palabras. Renovar la imagen, renovar la política. Nuevas referencias y nuevos conceptos. Nuevas fórmulas. Como cuando ha reivindicado el CIB (Conocimiento Interior Bruto) frente al tradicional PIB. Una apuesta por el conocimiento, la innovación y la creatividad. «Para saber si un gobierno es de derechas o de izquierdas, hay que ver lo que hace en educación y en política fiscal», ha afirmado. Otro modelo, recalca.

Dice que las primarias abiertas marcarán un antes y un después en la política española. Y no le falta razón. Son una respuesta de reactivación democrática extraordinaria frente a la crisis de la política, tan importante, ha dicho, como la económica. Rubalcaba ya no puede dar marcha atrás. Su propuesta no podrá ser creíble sin más pasos decididos de cambios y reformas, empezando por la de otro modelo de partido.

Entre sudores y secreciones nasales, Rubalcaba ha presentado al nuevo PSOE con tenacidad y pasión. Y a él mismo, también. Como si de una segunda gran oportunidad se tratara. Ha abandonado ese aire de superioridad intelectual que adornaba con su enigmática sonrisa, por una intervención trabajada desde el corazón y las entrañas. Ha parecido diferente, todo. Que lo sea, dependerá del día después, de los días siguientes. Pero ha ganado tiempo y crédito. En un momento de su intervención, ha dicho: «me tomo mi tiempo», para recuperar resuello y capacidad aeróbica. Parece que Rubalcaba ha ganado hoy algo más que tiempo.

OPINIÓN. EL PAÍS DIGITAL. 1O-11-2013.


ALGO SE MUEVE EN LA IZQUIERDA ESPAÑOLA ENTORNO AL PSOE.

noviembre 3, 2013

 

Un grupo de exdirigentes de Izquierda Unida participará activamente en la Conferencia Política que el PSOE celebrará la próxima semana en Madrid. Entre ellos se incluyen personas vinculadas al diputado de IU Gaspar Llamazares y tienen el apoyo del exjuez Baltasar Garzón y el rector de la Universidad Complutense, José Carrillo.

Todos ellos han firmado una carta abierta a la conferencia política del PSOE en la que aseguran que su “objetivo es la derrota de la derecha que está aprovechando la crisis para empujar al desempleo y a la marginación a amplias capas de la sociedad y, especialmente, a los sectores más frágiles”. El colectivo se hace llamar Espacio Abierto y ya tienen el visto bueno de la dirección del PSOE para participar en los debates de la Conferencia Política del próximo fin de semana. Aclaran, no obstante, que su objetivo es ajeno a cualquier movimiento orgánico o que interfiera en la organización del PSOE, para centrarse en aportaciones al debate teórico de la izquierda. Han mantenido contactos discretos con la número dos socialista, Elena Valenciano, y muchos de ellos estarán presentes en la Conferencia para participar en los debates sectoriales.

La tesis del manifiesto que han firmado es la de hacer “un llamamiento al entendimiento de sectores progresistas de la sociedad y pedir un giro a la izquierda de la socialdemocracia que permita configurar una alternativa a la actual hegemonía del PP”Entre los firmantes se encuentran los que fueran números dos de Gaspar Llamazares y de Julio Anguita cuando estos lideraban IU. Suscriben el texto Rubén Fernández y Mariano Santiso —afiliado ahora al PSOE—, así como José Mendi, aún militante de IU, exparlamentario aragonés y portavoz de la coalición en la etapa de Llamazares. También proceden de IU Pedro Antonio Ríos —exdiputado por Murcia y exasesor de Alfredo Pérez Rubalcaba en Interior—, Félix Taberna —excoordinador en Navarra de IU—, Francisco Román González (Melilla), Eduardo Tamarit (Andalucía) y Ángel García Castillejo, que fue miembro de la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones.

Firman también Héctor Maravall, exrepresentante de CC OO en el Consejo de RTVE; el empresario Manuel González y Orencio Osuna. La lista la completan el exjuez Baltasar Garzón, el rector José Carrillo, el rector de la Universidad Internacional de Andalucía, Eugenio Domínguez, y Pilar del Río, periodista, presidenta de la Fundación José Saramago y viuda del premio Nobel portugués. La invitación para participar en la Conferencia Política del PSOE es abierta a todos aquellos que tienen distinto nivel de implicación en el colectivo. El exjuez Garzón elaboró frases concretas para el manifiesto, según señalaron varios firmantes. No obstante, no participará en la conferencia, aunque les haya dado apoyo.

ELPAÍS. 03-11-2013.


ALMUNIA RECHAZÓ POR CARTA LA PETICIÓN DE DRAGUI [Presidente del Banco Central Europeo] DE SUAVIZAR LAS REGLAS PARA LA BANCA.

octubre 23, 2013

 

Bruselas marca territorio. El vicepresidente y comisario de Competencia, Joaquín Almunia, rechazó por escrito el pasado 3 de septiembre, en una carta a la que ha tenido acceso este periódico, las presiones de Mario Draghi, el presidente del Banco Central Europeo. Draghi pretendía relajar las reglas de ayudas de Estado a la banca tras los exámenes del Eurobanco, para evitar un nuevo episodio de inestabilidad financiera si algún banco solicita dinero público y Bruselas obliga antes a pasar por caja a los accionistas y a quienes tengan deuda de mala calidad. A la petición de clemencia para los poseedores de títulos como las preferentes en España, realizada también en una carta cargada de intención, Almunia responde a Draghi con un lacónico “eso se verá en su momento, y caso por caso”.

Los resultados de esas pruebas se darán a conocer en la segunda mitad del año próximo, pero tienen en vilo a algunas de las grandes capitales —y a Roma en particular—, que temen que sus bancos salgan mal en la foto y han puesto todas sus baterías diplomáticas en funcionamiento para rebajar en lo posible los daños. Y preocupan también al examinador: Draghi, expresidente del Banco de Italia, teme que si los exámenes son duros aparezcan agujeros, y que eso desencadene nuevos problemas si Bruselas muestra la misma dureza que en el pasado. En la misiva, Almunia considera que “las preocupaciones” de Draghi “se pueden encauzar” a través de las normas actuales, publicadas en agosto, sin necesidad de poner en peligro la estabilidad financiera. Draghi, en fin, pretendía que Bruselas bajara la guardia como norma general, pero Almunia quiere garantizarse margen de maniobra para decidir en función de cada banco.

Almunia viene a decir que hay tiempo de sobra para que la banca se recapitalice: “Sus preocupaciones por la posible falta de capital que resulte de los exámenes solo se verán a partir de la segunda mitad de 2014”, cuando se den a conocer los resultados, informa al banquero central europeo. Y a partir de ahí, habrá todavía unos meses —tal y como pasó con las cajas españolas— para que las entidades financieras consigan fondos, con lo que ese proceso podría alargarse hasta bien entrado 2015. En caso de que pasado todo ese tiempo haya que acudir al dinero del contribuyente, la regla general será aplicar quitas a los accionistas y a las preferentes, como sucedió con las cajas españolas. En Italia vence deuda subordinada por importe de 2.700 millones en 2014 y 4.600 millones en 2015, según datos recogidos por el think tank Eurointelligence. De ahí la preocupación de Draghi.

La misiva contiene alguna dosis de veneno, pese a que las relaciones entre Competencia y el BCE han sido y son excelentes, según las fuentes consultadas. Bruselas publicó su normativa en agosto y Almunia considera que los mercados ya le han puesto un precio a la deuda de baja calidad, basándose en la aplicación de las reglas de ayudas de Estado en España y en otros países desde que empezó la crisis. “Las contribuciones de los acreedores júnior [la deuda de peor calidad] han sido solicitadas sistemáticamente en años anteriores en varios países”, indica Almunia, “incluidas las recapitalizaciones por motivos de precaución”, las que preocupan a Draghi. “Esto no es nuevo”, remacha el comisario para quitar hierro al temor del BCE a que tras las pruebas de esfuerzo las posibles quitas levanten una polvareda en los mercados.

El Europarlamento hizo ayer un llamamiento a Almunia para que resista la presión de Draghi (o la de los alemanes, que quieren lo contrario: más dureza). “Sería un error mostrar debilidad”, defendió Sharon Bowles, presidenta de la comisión de asuntos económicos. “Esto no es lo que esperábamos del BCE”, atacó. Junto a las críticas por la italianidad de Draghi, que según los analistas ha puesto en peligro su credibilidad, el eurodiputado alemán Sven Giegold dijo que la carta del BCE “es la demostración de que los banqueros centrales no deberían tener ninguna responsabilidad sobre la resolución de entidades”.


GÉNOVA MIRA CON CRECIENTE DESCONFIANZA EL DESCARADO «TONTEO» ENTRE BÁRCENAS Y EL JUEZ RUZ.

octubre 15, 2013

La carta que hizo llegar Gómez de Liaño al magistrado, anunciando su disposición a una colaboración plena, se entiende como el camino sin retorno de la aceptación del extesorero de que su futuro (y el de su mujer) ya depende sólo del juez.

El pasado 18 de septiembre de 2013, Javier Gómez de Liaño entregaba al juez Pablo Ruz dos cartas. Una era copia de la que su defendido, Luis Bárcenas, había enviado esa misma mañana a su representante legal en Suiza, Jean Marc Carnicé. En esta carta, el extesorero del PP pedía a su abogado que prestara toda la colaboración necesaria al propio Ruz, que se iba a trasladar a Suiza en comisión judicial el 2 de octubre.

“…como demostración de la predisposición del señor Bárcenas a colaborar al máximo…”

La segunda iba firmada por el propio Gómez de Liaño, e iba dirigida directamente al propio Ruz. En ella, de manera inequívoca, Bárcenas, sin duda con el consejo del abogado, venía a poner blanco sobre negro el cambio que desde el verano venía realizándose en su relación con el juez de la Audiencia.

Esta segunda carta, de cuyo contenido ya se supo, y con la que se ha hecho ELPLURAL.COM, es muy ilustrativa y explicaba las razones de la existencia de la otra carta que se entregaba a Ruz, la enviada a Suiza: “…como demostración de la predisposición del señor Bárcenas a colaborar al máximo en la instrucción del procedimiento y, por consiguiente, acreditar que muy lejos de su ánimo está el hacer cualquier maniobra o acto encaminados a la ocultación, alteración o destrucción de fuentes de prueba”, se puede leer en el arranque de la misiva.

Alejándose de Génova, acercándose a Ruz.

asta era, como decimos, la plasmación de un cambio en el comportamiento de Bárcenas: el de su actitud frente a la justicia. Un cambio que se plasmó a partir de su cambio de abogados -dejó a los que le había puesto el PP y los cambió por Javier Gómez de Liaño-; que aún quedó más patente en su comparecencia ante Ruz, en la que hizo revelaciones incriminatorias; que se rarificó en la entrega de documentos al juez, incluido el pen-drive… En fin, un proceso paralelo, durante el que se alejaba de la influencia de Génova, y se ’acercaba’ al juez.

¿A cambio de qué? En medios judiciales que participan en el proceso no cabe duda de lo que pretende el extesorero. Lo que está diciendo Bárcenas al juez es que está dispuesto a colaborar a cambio de lograr su puesta en libertad condicional. La estrategia que se plantea en estos casos, un pulso no verbalizado, es cómo se lleva a cabo ‘la transación’: se me libera de la cárcel y colaboro plenamente, o colaboro plenamente y así consigo la libertad. Lo que nos vienen a decir en esos medios cercanos al proceso es que Bárcenas y Gómez de Liaño en estos momentos están ‘tanteando’ al juez, mostrando su buena voluntad, a la espera de lo que pueda caer.

Ruz, metódico y molesto.

El juez Ruz, que en un principio pareció el ‘preferido’ por Génova (desde luego lo fue cuando apareció Gómez Bermúdez a lomos de la demanda que presentó Izquierda Unida) ha ido cambiando la imagen que de él mantienen las defensas y las diferentes acusaciones particulares. En la dirección del PP le ven ahora de manera muy diferente. Desde luego, gusta mucho menos a ‘los populares’ desde que les excluyó como parte personada en el caso, acusándoles de ser a un tiempo acusación y acusado. Pero aún les ha preocupado más con la manera en que está llevando la investigación de un hecho muy peligroso para el futuro de su número dos, el del recibí de 200.000 euros en el que anda enredada María Dolores de Cospedal, por el que supuestamente Sacyr entregó un dinero para su campaña coincidiendo con la concesión de una contrata de retirada de basuras para la ciudad de Toledo.

El fiscal del caso, con el que supuestamente Ruz lleva la instrucción, Antonio Romeral, actuó en este asunto de acuerdo con el juez para pedir al PP “toda la documentación contable o de cualquier otra índole”. Pero el fiscal se opuso a que se llamara a declarar a José Angel Cañas, gerente del PP en Castilla-La Mancha, así como a Vicente Tirado, el ‘segundo’ de Cospedal y que supuestamente habría ‘actuado’ para lograr el acuerdo de ‘la donación’ de los 200.000 euros. Pues bien, el juez, no dudó en ignorar la ‘oposición’ del fiscal, algo que se cuida de hacer pocas veces, y ha solicitado la comparecencia para dar testimonio a primeros de noviembre de Cañas y Tirado así como que se investiguen los posibles vínculos entre donación de Sacyr y el contrato con el ayuntamiento de Toledo.

En este caso ha resultado fundamental la documentación y el testimonio de Bárcenas. Igualmente lo podría ser para que llegue a buen puerto la indagación del juez en Suiza y para la que, como hemos dicho, el extesorero popular se ha ofrecido a ayudar a través de su abogado en aquel país…

Ruz no es Alaya, pero no se detiene en su marcha.

Estos movimientos de su antiguo afiliado y directivo, preocupan enormemente en Génova. “Ruz no es una Alaya -nos han dicho gente que conoce bien la investigación que lleva a cabo el magistrado de la Audiencia Nacional, y que confrontan su actuación con la magistrada de los ERE de Andalucía-. Es muy reacio a meter a gente en la cárcel, de hecho sólo lo ha hecho con Bárcenas y sigue sin decidirse a hacerlo con su mujer; se mueve con pies de plomo para pedir registros, como lo demuestra que tan sólo ha pedido el de la oficina del arquitecto que llevó a cabo la remodelación en Génova y no la de la sede.., pero no da un paso atrás”.

Una constancia y una solidez que, nos dicen, preocupa mucho en la dirección ‘popular’, y que se concreta en dos aspectos. Por un lado en que el juez, como hemos recordado antes, les mantiene fuera de la investigación desde que les ‘expulsó’ como acusación particular. Por otro, en que no rechaza entrar en temas espinosos, como están siendo las investigaciones sobre financiaciones irregulares en Castilla-La Mancha, en La Rioja, en Pontevedra o en Valencia. Y, sobre todo, en que mantiene abierta la ‘escucha’ a un Bárcenas que cada vez da más claros deseos de ‘negociar’.

Discos duros y agendas cuyas copias podrían ‘aparecer’.

¿Qué podría tener Bárcenas para seguir ‘negociando’ su colaboración con Ruz? Es especulación, pero en el entorno del proceso se piensa que los discos duros de los ordenadores que se borraron en Génova fueron copiados antes, así como las agendas que su secretaria en Génova declaró ante Ruz “haber destruido”. Y, desde luego, Bárcenas podría ser clave para aclarar la última petición que el pasado viernes ha realizado Ruz a la Unidad Central de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF): la investigación de coincidencia en fechas y cantidades entre movimientos en las cuentas del extesorero en Suiza y los apuntes de los supuestos pagos en negro que aparecen en ‘sus anotaciones de la contabilidad en B del PP.

Si se demostrara la relación directa entre ingresos en cuenta y apuntes contables, la situación se complicaría muy mucho para Génova.., y para Moncloa. Porque vendría a demostrarse que el dinero ‘en negro’ era del PP, independientemente de que Bárcenas se lo apropiara y lo ingresara en sus cuentas, o de que esas cuentas fueran en todo, o en parte, propiedad del propio partido y Bárcenas no fuera en esos casos sino un testaferro.

Bárcenas ha tendido la mano. De lo que ponga en ella, quizás dependa que el juez pueda escuchar sus peticiones no sólo para lograr salir de la cárcel con la libertad condicional, sino también para que su mujer no sólo no ingrese en prisión, sino incluso para que pueda disponer de más dinero para su vida diaria. Un diálogo de gestos, sin palabras, que en Génova escuchan con suma atención.

[elplural.com. 15.10.13]


» UN PAPA NO PAPA», por Juan Arias.

septiembre 19, 2013

«NUNCA HE SIDO DE DERECHAS».

 Con su larga entrevista a La Civiltà Cattolica, el papa Francisco ha hecho en realidad una confesión pública. Y eso es algo nuevo en la Iglesia. No solo afirma que es “pecador”, algo que podría sonar a retórica, sino que confiesa sus pecados y los enumera sin pudor. Más aún, como en toda verdadera confesión, promete no repetirlos, sobre todo después de haber “aprendido de la vida”. Estamos, guste o no, ante un papa no papa, si lo comparamos con los otros papas de la historia.

Ya alguien ha dicho en Roma que espera que al próximo sucesor de Pedro “le dejen volver a ser papa”. A Francisco no lo consideran como tal. Y él, hace de todo para no parecerlo. Hasta le cuesta llamarse tal. Por eso, habla y da entrevistas como si no lo fuera. Los papas medían sus palabras, decían sin decir, jamás confesaban haberse equivocado.

¿Cuándo se ha visto a un papa definirse políticamente: “Nunca he sido de derechas”? ¿O confesar que había sido tachado de ultraconservador pero por culpa suya, porque reaccionaba sin “escuchar”, actuando “autoritariamente”? Confiesa que le faltaba experiencia y era precipitado en sus juicios y acciones.

Francisco traza él mismo su perfil humano, social y político, al mismo tiempo que pergeña la Iglesia que desearía vivieran sus seguidores. Una Iglesia, sobre todo, capaz de “saber escuchar”, actuando con “misericordia”, en vez de ir siempre con la condena en la boca. Y sensible a los que no piensan como él. Lo que quizás más choca es el lenguaje que usa Francisco, duro solo cuando critica a los eclesiásticos como meros “funcionarios”, como fríos “analistas de laboratorios”, en vez de ser médicos en “un hospital de guerra”.

Le gusta la figura del pastor y la define sin ambigüedad: tiene que estar dispuesto a “curar heridas”, ofrecer “cercanía”, en vez de alejar con su aspecto de burócrata de la fe, algo que debe haber sonado a Viernes Santo en la curia romana. Y siempre bajo el lema de la comprensión: “¿Quién soy yo para juzgar?”. Y usa para hablar el lenguaje de la calle llegando a utilizar la expresión, en la polémica feminista, de “machismo con faldas”.

He conocido, con Francisco, a siete papas, y es la primera vez que advierto que es un papa que parece esforzarse en sus palabras y gestos para no serlo. Él se siente más cercano al profeta de Nazaret que al papa Rey. Como me decía un no católico en Río, durante su último viaje, Francisco parece “auténtico”, sin posar. La impresión que da en esta misma entrevista es que es papa, que “cree” en lo que dice y lo practica.

¿La afirmación más fuerte de su entrevista? Quizás cuando dice: “No se puede hablar de la pobreza sin experimentarla”. Toda una encíclica que no dejará de escocer en más de un círculo eclesiástico.

CITA «UN PAPA NO PAPA». POR JUAN ARIAS. 20-09-2013.


SEGÚN XAVIER VIDAL-FOLCH, EL FEDERALISMO ES LA PROPUESTA QUE PUEDE RESOLVER LAS TENSIONES ENTRE CATALUÑA Y EL RESTO DE ESPAÑA.

septiembre 19, 2013

 

En un artículo tuyo de 1991, a raíz de un hecho aparentemente menor como unas elecciones a la Cámara de comercio, haces una disección de la burguesía catalana y muestras unas fisuras que hasta entonces no habían trascendido. ¿Continúa dividida? ¿El conflicto catalán es una nueva línea de fractura o continúa siendo eminentemente una élite con intereses de clase y en contra de los intereses de las clases subalternas?

Lo que hay son diferentes acentos. Creo que no hay una burguesía catalana monolítica sino distintos sectores de la élite económica. Desde aquella época se ha ido transformando y en algunos aspectos debilitando más. Por ejemplo, la contradicción entre los liberales y los proteccionistas ahora es menor, todos son más bien liberales de credo y, a veces, proteccionistas de ejercicio. De conservadores y centristas todavía hay un poco de todo. Hay más diferenciación en la línea nacional, catalanismo o no catalanismo. En esto se han radicalizado un poco las posturas, a pesar de que se procura que esto no afecte al negocio. Esto es bastante importante: que no afecte al negocio. Hay una cierta pérdida de peso: antes había una vieja burguesía textil y unos grupos que salían en el entorno de las grandes empresas o grupos bancarios y todo esto ahora ha cuajado de forma un poco diferente y hay una hegemonía muy importante de una institución financiera y de su grupo industrial. El empuje y variedad de los grupos burgueses en Cataluña quizás es menos notorio ahora que cuando escribía estas cosas.

¿Artur Mas está cabalgando sobre un tigre desbocado del que ya no podrá recuperar las riendas?

Tiene muy difícil el control de la bestia. ¿Por qué? Porque ni él, por carácter, familiar y político, ni su partido, que ha sido siempre un partido de entendimiento y de pacto y de regateo, no están avezados a una dialéctica de confrontación total, y por lo tanto es muy difícil hacer eficaz tu propia bestia.

¿Crees que se han puesto al servicio de una causa en la que creen o que han intentado aprovechar una causa con cierto apoyo social para servir a sus propios intereses?

Creo que el presidente de la Generalitat tomó el todo por la parte en la manifestación de la Diada. En aquella manifestación había distintas actitudes: aparte de una idea común de protesta, había muchas motivaciones distintas para asistir. Por lo tanto, por importante que fuera, no estaba todo el cuerpo electoral de Cataluña. Y creo que aquí hubo un error de lectura, que en el fondo ha conducido a que el presidente de la Generalitat esté gobernando no con el programa propio de su coalición, el programa electoral con que se presentó, sino con el programa de su aliado, que es ERC. Es muy difícil gobernar un país cuando tu partido está jugando a un juego al que no está acostumbrado a jugar y que, además, estás gobernando con un programa que no es el tuyo sino que es de otro. Es una situación, como mínimo, un poco curiosa para llevar un poco ordenadamente las cosas, ¿no? Y cuando digo curiosa quiero decir que es muy difícil ser eficaz y eficiente en tus objetivos partiendo de este principio.

¿Puede ser que estemos a las puertas de que se rompa el empate perpetuo entre Cataluña y España que, como apuntas en ¿Cataluña independiente? [Catarata, 2013], hace tres siglos que dura?

Sí, todo puede ser. El problema es si es deseable o no. A mí los empates me gustan. En realidad me gusta que mi equipo gane, pero los empates en política son diferentes de los empates en fútbol. En fútbol lo que quieres es ganar por goleada, si puede ser en el Bernabéu y por cinco. Pero la política moderna se hace a base de compromisos, de pequeñas victorias, de adelantos compartidos y progresos repartidos, de facturas redistribuidas… es un poco aburrido, es alambicado, no es épico, no tiene una gran lírica, no es una cosa hecha de grandes epopeyas, pero para las epopeyas ya había las guerras, que eran un desastre. Creo que la democracia moderna es esto, y además nos conviene, porque los catalanes en esto no somos malos y somos perseverantes en la gestión de las pequeñas cosas. De hecho, a veces digo que el pueblo catalán es un pueblo prudente, y si quieres, incluso cobarde.

¿Puede ser que ahora haya perdido el miedo?

Prudente y cobarde en el buen sentido de la palabra. No está mal que el pueblo catalán sea un pueblo prudente, en general, más bien del seny, que de vez en cuando tiene estos episodios de rauxa, porque los prudentes no hacen guerras. ¿Y cuáles son los puntos fuertes de esta sociedad? Son dos. Cataluña es dos «C». El comercio y la cultura. C-C-C: catalanes, comercio y cultura. Y tendríamos que especializarnos en esto. Quizás hemos hecho un poco de aventura en otras cosas en las cuales no tendríamos que habernos especializado. Históricamente estamos más dotados, no por inclinación natural sino porque estamos más entrenados, para el comercio. Aquí hemos comerciado mucho. Mientras los Papas querían que hiciéramos cruzadas, nosotros íbamos a comerciar con los moros y lo hemos seguido haciendo con una cierta gracia. Y después, en la cultura, no solo hemos tenido el gótico, el románico y el modernismo, sino PicassoMiró y Dalí, que componen una tríada de cierto gozo. Y esto nos ha dado bastante buen resultado. Cuando a veces escucho decir que Cataluña está asfixiada y veo las cifras que dicen que esta, hasta la crisis, es la región que mejor ha funcionado de los cuatro motores de Europa y que estamos al 115% o al 120% de la renta per cápita europea pienso que de asfixias como estas que me den unas cuantas para desayunar cada día. Pero esto no quiere decir que en el memorial de agravios catalán no haya muchas razones que tengan que ser atendidas, tanto económicas, como políticas y simbólicas.

¿Crees que el encaje actual es el menos malo de todos?

No, yo creo que es muy mejorable y que está en tránsito de un empeoramiento brutal. Estamos empeorándolo. El gobierno central está haciendo una refundación subrepticia del modelo constitucional español. Leyes y proyectos como la  reforma de las administraciones, la garantía de unidad de mercado, el regulador único que acaba con la descentralización de los supervisores, la autoridad fiscal independiente, incluso la reforma eléctrica, están pautando organismos, maneras de hacer y mecanismos que suponen una centralización extraordinaria y más o menos enmascarada por unos objetivos de simplificación administrativa, de evitar duplicidades y dilapidación de recursos, objetivos que, en sí mismos, están bien. Pero en realidad se está desnaturalizando la impronta política del estado de las autonomías, que se tiende a convertirlo en un estado de las diputaciones. Se está yendo hacia la descentralización puramente administrativa y no política, cuando la gracia de las autonomías es que eran un estado prefederal, con una dimensión política. Esto se había hecho, sobre todo, porque los catalanes, muy notoriamente, y los vascos habían presionado. Si el neocentralismo del gobierno del PP se incrementa, y el moderantismo de los nacionalistas catalanes se convierte cada vez más en un radicalismo práctico, es difícil que no nos hagamos daño.

¿Cuál sería la solución, si dependiera de ti? ¿Cuál es tu escenario óptimo?

Un futuro que fuera una cierta mixtura entre el federalismo alemán y otros modelos de estados en los cuales hay plurinacionalidad y plurilingüismo. Una reforma federal puede ser una vía muy practicable si añade no solo un reconocimiento explícito de la plurinacionalidad en el sentido más práctico de la palabra, sino también, por ejemplo, un reconocimiento muy pleno de las cuatro lenguas del Estado. Las algarrobas administrativas y económicas se pueden resolver por la vía federal. Esto es: el Estatuto no rebajado, no reinterpretado a la baja, lo que conecta con el modelo federal alemán. Pero a esto se tiene que añadir una cuestión simbólica, que es un problema de reconocimiento. Yo creo que la gente está pidiendo un reconocimiento, y me parece que una buena mayoría de los españoles no catalanes entiende el concepto. Por ejemplo, yo he ido a presentar el libro en Málaga y había un centenar de personas en la Sociedad Económica de Amigos del País y eran malagueños. Había tres que eran un poco falangistas, pero aparte de estos tres, el resto lo entendían todo, podíamos discrepar en algo, pero era una cosa muy educada, no eran esta España que dicen que nos roba, que no nos entiende, que nos insulta. En Málaga, no. Que Málaga también es España, España no es solo los ministerios de Madrid. ¿Por qué no se pueden utilizar las cuatro lenguas como mínimo dentro del Parlam

ento español? Apliquemos en este tema también el sistema europeo: las lenguas de trabajo, después, serán las que quieran, pero en el Parlamento Europeo se usan todas las lenguas. ¿Es un problema de recursos económicos? ¿De pinganillo? ¡No ridiculicemos el pinganillo! De hecho es un instrumento extraordinario, mientras no todos hablemos las cuatro lenguas. Esto por un lado, y por otro lado, aquellas instancias que tienen más que ver con el ciudadano y con sus derechos, como el Tribunal Supremo o el Tribunal Constitucional, tendrían que poderte atender en tu lengua. A ver, no irás a buscar que te atiendan en gallego en la comisaría de Algete, pero en el Tribunal Supremo ¿por qué no? Que espabilen un poco los jueces, que son gente que hace carrera y que hace oposiciones, que aprendan un poco de idiomas y que después haya intérpretes. ¿Esto no resolvería mucha parte de los problemas? Hay un problema de poder político, de economía y de reconocimiento, y yo creo que, hasta ahora, las propuestas federales que hay —y hay algunas muy interesantes encima de la mesa— van en la buena dirección pero les falta esta parte del reconocimiento. Tendrían que ser algo más osadas.

¿Crees que ahora es demasiado tarde y que los que han dado un paso adelante ya no se conformarán solo con esto? ¿Y que, aunque lo hicieran, las propuestas federales las sostienen actores políticamente irrelevantes, tanto en Cataluña como en España?

Hay dos maneras de enfocar el problema: si no se quiere arreglar o si se quiere arreglar. Dicho de otro modo, si se quiere que se desboque o se quiere que se reconduzca. Y yo prefiero arreglar las cosas antes que estropearlas. Y creo que la mayoría de la ciudadanía de Cataluña y la mayoría de la ciudadanía española está más en esta posición de ordenar y de dar curso a los problemas que en la de estropearlos. La solución no está ni en el centralismo ni en la ruptura, y por lo tanto tenemos que buscar una solución con la cual todo el mundo pueda convivir aunque no sea su ideal. Porque, ¿cuál es el mecanismo de la cultura democrática europea? Pues buscar soluciones en las que todo el mundo pueda habitar, a pesar de que no sean las más satisfactorias. Soluciones en las que todo el mundo esté un poco descontento pero todos estén suficientemente cómodos.

¿Una parte de esta solución podría ser habilitar mecanismos de consulta?

Hay un 76% de la población de Cataluña que quiere compartir identidades, que no quiere renunciar a la identidad catalana ni quiere renunciar a la identidad española, y esto es muy importante. Todos estos han leído a Amin Maalouf, y si no lo han leído, comparten su tesis: se pueden tener identidades superpuestas y no necesariamente enfrentadas. Por lo tanto, hay que buscar soluciones políticas para que estas identidades se puedan desplegar de forma convivencial y óptima. Esta es la primera cosa que se tiene que tener presente.

Hay un porcentaje muy similar que quiere un referéndum.

Hay una mayoría muy significativa de los catalanes que quiere hacer un referéndum sobre el futuro político de Cataluña. Es una mayoría muy cualificada, una mayoría superior a los dos tercios. Nos encontramos con un principio democrático a salvar, y además un principio de legalidad a respetar.

¿Qué principio prevalece sobre cuál?

¿Por qué tienen que contraponerse? La legalidad permite hacer un referéndum. La Constitución permite, en el artículo 92, hacer referéndums. Eso sí, de forma autorizada o delegada por el Gobierno central. La vía es clara. No vale cualquier legalidad. Esta cosa que dicen en el programa de gobierno, que han dicho los líderes políticos del soberanismo «lo haremos con cualquier legalidad», ¿qué significa? ¿Que hay una legalidad de quita y pon? ¿Rebusca y escoge? Hay una ley de consultas catalana —que por cierto está recurrida en el Tribunal Constitucional— que en el artículo siete dice que después de que el Parlamento de Cataluña haya dicho que quiere hacer una consulta aplicará el artículo 92 y enviará al Gobierno la petición de hacer un referéndum. Al final aplicas la legalidad del artículo 92, no hay diferentes legalidades entre las que puedes escoger. Puedes acogerte a diferentes normas, pero después hay una jerarquía. ¿Qué es esto de «la legalidad que se acontezca»? El derecho no tiene agujeros.

El derecho no lo sé, pero su aplicación…

La aplicación es otra cosa, pero el derecho no tiene agujeros porque hay un principio de jerarquía normativa y de expansión de las normas. Esto es lo más bonito del derecho. No puede no hacerse justicia. Si hay una mayoría de ciudadanos que quieren hacer un referéndum, y si esto se plantea de una forma legal y pactada —que es como se plantean las cosas entre gente seria, porque no querremos hacer una kermesse, un referéndum de feria de pueblo, niños de 13 años, unos cuántos extranjeros que pasaban por allí, sin censo, sin documentos de identidad, que la gente presente la partida bautismal—, que se haga. ¿O qué haremos? ¿Una broma? Esto es una cosa muy seria. Por lo tanto un referéndum se tiene que hacer en base a la legalidad y al pacto. De hecho es la única forma que es admisible, y quien diga lo contrario está llevando a la gente a caminos complicados. Ahora bien, si es lo que quieren…

Hablando de pactos, y estando donde estamos, ¿podría repetirse un Pacto del Majestic entre PP y CiU? ¿Hay alguna consecuencia de aquel que podamos percibir todavía hoy o ha habido una fractura total con aquel estado de cosas de no hace tantos años?

Aquel fue un pacto de intereses mutuos de dos partidos. Ahora el pacto que se tendría que hacer es un pacto más de fondo y que incorporara más formaciones y más sensibilidades. No es imaginable que un pacto de aquel tipo nos saque de este problema; hay que ir hacia un pacto de estado.

Pero si pudiera sacarnos de esta, ¿sería posible a corto plazo?

A corto plazo, no. Están empeorando las cosas. El liderazgo del soberanismo está más en la dinámica del agit-prop que no en la de buscar realmente el acuerdo. Y el liderazgo del centralismo está en la dinámica del rechazo sistemático a todo, de utilizar la constitución como un frontón y el recurso al Tribunal Constitucional como un trámite automático, como si las soluciones pretendidamente jurídicas pudieran resolver un problema político de primera magnitud. Por lo tanto, las posiciones no sólo están enfrentadas sino que cada vez se están alejando más. Y el problema crece. Las soluciones tienen que ir por la vía o bien de un acuerdo de base de la reforma constitucional, o bien por la vía del pacto del referéndum, o bien por una vía combinada que integre estos dos caminos. Pero, sobre todo, los protagonistas se tienen que sentar a la mesa. Y no durante dos horas en una reunión en la que uno diga «como sé que me dirán que no, voy allí y hago el trámite y ya estoy justificado» y el otro diga «voy a la reunión para que no me puedan decir que no he escuchado, pero diré que no». ¿Ahora lo resolveremos todo con una carta? ¿Esto es serio? ¿Hay voluntad de negociar por parte de alguno de los dos protagonistas? A mí me gustaría verlo, porque creo que la solución siempre pasa por una combinación de presión, de hacerse notar, y después de dialogar, negociar y pactar. No veo otra.

[CITA (fragmento). REVISTA JOT DOWN. Entrevista a Xavier Vidal-Folch, por Carles A. Foguet. Agosto 2013]


RUBALCABA PIDE UNA «REFORMA FEDERAL» PARA ACABAR CON LA «CRISIS TERRITORIAL».

septiembre 15, 2013

 

La España federal que defiende el PSOE

Respuesta al pulso catalán.La España federal que defiende el PSOE como respuesta al desafío independentista catalán obligaría a reformar la Constitución para introducir mejoras en el autogobierno de las autonomías.

Hechos diferenciales, derecho civil, lengua y cultura. A los hechos diferenciales ya recogidos en la Constitución los socialistas proponen añadir uno reconociendo expresamente “los derechos históricos que el Estatuto catalán recoge en su artículo 5”, que son el derecho civil, la lengua, la cultura y la proyección de estos en el ámbito educativo.

Una nueva Cámara Territorial en lugar del Senado. Los socialistas plantean sustituir el actual Senado por una Cámara territorial cuyos miembros no sean elegidos por los ciudadanos directamente sino designados o bien por los Gobiernos autónomos o por los parlamentos autónomos o, aún está por definir, algún tipo de votación en urna. La aprobación de leyes con “alto contenido de relevancia autonómica”, que son la inmensa mayoría, requeriría el «asentimiento inexcusable» de esa Cámara.

Financiación. El PSOE asume como “aconsejable” el concepto de “ordinalidad”, aunque no lo incluye entre los “principios” de la financiación autonómica y lo limita a la interpretación del Constitucional: que la aportación de las comunidades más ricas a la solidaridad no las deje en peor lugar en renta que a las que reciben la aportación.

Justicia. “Con carácter general”, los procesos judiciales deberán culminar en los Tribunales Superiores de Justicia autonómicos, no en el Supremo. Y propone una “cierta territorialización” del Consejo del Poder Judicial, pero no en cuanto a sus funciones fundamentales.


FEDERALISMO: IDEAS PRINCIPALES QUE DEFIENDE EL PSOE.

septiembre 15, 2013

 El secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba ha reclamado hoy una reforma federal de la Constitución para acabar con lo que ha calificado de “una crisis territorial en toda regla”. El líder del PSOE contentaba así a los socialistas catalanes en su fiesta anual, La fiesta de la rosa, pero con matices, porque no ha concretado de su propuesta más de lo que PSOE y PSC acordaron en julio en Granada.

Minutos antes de su intervención, el primer secretario del PSC, Pere Navarro, se ha dirigido a Rubalcaba con una petición expresa: “Cuando los gobiernos no actúan”, ha dicho “la oposición tiene que tomar las riendas, te pido que intensifiques los contactos con los partidos en España y en Cataluña para resolver el conflicto”.

Tras el éxito de la Via Catalana, con 400.000 catalanes reclamando un referéndum sobre la independencia, Navarro emplazó a los dos grandes partidos españoles a negociar “un nuevo estatus” y una nueva financiación para Cataluña. Rubalcaba, por su parte, manifestó que había que escuchar a quienes se manifestaron y adelantó que en Gavà defendería una “reforma constitucional meditada y consensuada”.

 

Respuesta al pulso catalán.La España federal que defiende el PSOE como respuesta al desafío independentista catalán obligaría a reformar la Constitución para introducir mejoras en el autogobierno de las autonomías.

Hechos diferenciales, derecho civil, lengua y cultura. A los hechos diferenciales ya recogidos en la Constitución los socialistas proponen añadir uno reconociendo expresamente “los derechos históricos que el Estatuto catalán recoge en su artículo 5”, que son el derecho civil, la lengua, la cultura y la proyección de estos en el ámbito educativo.

Una nueva Cámara Territorial en lugar del Senado. Los socialistas plantean sustituir el actual Senado por una Cámara territorial cuyos miembros no sean elegidos por los ciudadanos directamente sino designados o bien por los Gobiernos autónomos o por los parlamentos autónomos o, aún está por definir, algún tipo de votación en urna. La aprobación de leyes con “alto contenido de relevancia autonómica”, que son la inmensa mayoría, requeriría el «asentimiento inexcusable» de esa Cámara.

Financiación. El PSOE asume como “aconsejable” el concepto de “ordinalidad”, aunque no lo incluye entre los “principios” de la financiación autonómica y lo limita a la interpretación del Constitucional: que la aportación de las comunidades más ricas a la solidaridad no las deje en peor lugar en renta que a las que reciben la aportación.

Justicia. “Con carácter general”, los procesos judiciales deberán culminar en los Tribunales Superiores de Justicia autonómicos, no en el Supremo. Y propone una “cierta territorialización” del Consejo del Poder Judicial, pero no en cuanto a sus funciones fundamentales.


«MADRID PIERDE, EL PRÍNCIPE GANA», por Antoni Gutiérrez-Rubí.

septiembre 8, 2013

.Sin duda, la intervención del Príncipe de Asturias ha sido una pieza memorable y destacable, aunque no haya podido ser decisiva. Si se ha perdido, no ha sido por él. Su profesionalidad en el discurso final ha demostrado que España tiene en su figura una apuesta de futuro fundamental. Estas son las claves de análisis.

Lenguas. El Príncipe ha hablado en francés e inglés (los idiomas olímpicos) y, evidentemente, en español para remarcar su valor vehicular de lengua común entre los pueblos latinoamericanos con una amable y simpática mención a Argentina.

.Comunicación no verbal. Su rostro ha expresado sentimientos, convicciones, recuerdos y deseos. El acompañamiento gestual y corporal, así como el movimiento de manos, ha sido ensayado con eficacia y solvencia.

Escenario. En todo momento, sabía a quién hablaba y dónde estaban las cámaras. Su orientación y alineación de la cabeza estaban siempre en coherencia, buscando la comunicación visual con cada grupo de destinatarios.

Storytellling. Un texto bien construido, con un recorrido sólido como deportista, padre y Príncipe. Su trayectoria como compromiso y como crédito. Los argumentos finales bien expresados, simple y claramente.

Complicidad. Constante. Con los compañeros de la candidatura, con los miembros del COI y con los espectadores. Las referencias a Pau Gasol y a la Alcaldesa (sin citarla) como representante de la ciudadanía madrileña han estado en su punto y han sido oportunas.

Grecia. La referencia a su madre (no ha citado al Rey) y su influencia griega −de herencia la ha cualificado− ha sido destacable y sorprendente. Con varias lecturas posibles. Y un puente natural para hablar de los clásicos: Aristóteles, Platón y Sócrates.

Hijos e hijas. La alusión a los futuros hijos de Pau Gasol (sobre lo que bromeó el deportista) y la relación con sus hijas… (jugarán juntos, harán deporte juntos, tienen un futuro compartido) es especialmente significativa en un momento de tensión territorial como la que vivimos en las relaciones Catalunya-España.

Pasión. «Con todo mi corazón» ha dicho, y así lo ha transmitido y mostrado. El Príncipe más encantador y atractivo (impecable vestuario y corte de pelo) ha estado atento, simpático y afectuoso. Ha roto con la imagen de frialdad que a veces transmite por exceso de rigor, control o tensión.

Estrategia: «Los beneficios del deporte se miden en generaciones, no en dólares» dijo el Príncipe. Sorprende que la candidatura haya puesto tanto empeño en lo económico −y los posibles brotes verdes del momento actual− y en la materialización de las obras olímpicas. Quizá un mejor enfoque a lo que podemos aportar al mundo (más que lo que podemos recibir del olimpismo) hubiera sido clave y decisivo. Siete años son muchos… y los miembros del COI piensan en el futuro, no el presente.

Equipo. Si el Príncipe ha estado a la altura… no creo que se pueda decir, honestamente, que lo hayan estado los demás. La calidad de oratoria y de discurso de Mariano Rajoy, por ejemplo, era mejorable, como mínimo. Estas presentaciones tienen un efecto coral. Y tener un buen final puede no ser suficiente, si no tienes un buen inicio. Ser simpático puede no bastar, y hacer lo que se puede y no lo que se debe, tampoco.

Balance. Madrid ha perdido, pero el Príncipe ha dado un paso muy sólido hacia el futuro. Por actitud, disponibilidad y solvencia. Madrid no sé si tendrá otra oportunidad… pero el Príncipe reclama la suya.

CITA. EL PAÍS. O8-09-2013.


«ESTO ES UN JUEGO POLÍTICO DE ALTO NIVEL QUE NO SABEMOS JUGAR». Por Carlos E. Cué.

septiembre 8, 2013

 

  “Esto es política, ya nos hemos presentado tres veces y lo sabemos. No tiene nada que ver con la calidad de tu candidatura. Y ya sabemos que la política española no está en su mejor momento”. El resumen de uno de los miembros de la delegación, desolado tras la derrota, se repetía en otros, incluso los de mayor nivel. “Esto es política”, era la frase más repetida, incluso el entorno de la familia real. “Este es un juego político de alto nivel, con intereses internacionales, con dinero, con equilibrios. No siempre limpio. Y está claro que a eso nosotros no sabemos jugar bien”, resumía uno de los políticos desplazados hasta Buenos Aires.

“Está claro que no tenemos fuerza política y económica para enfrentarnos a un coloso como Japón”, resumía otro político.En el entorno del presidente del Gobierno ya se había instalado un gran pesimismo en las últimas semanas, sobre todo por la confirmación de que Madrid no tenía el apoyo de los teóricos socios europeos porque varios de ellos aspiran a presentar su candidatura en 2024, y unos Juegos en España eliminaban esa posibilidad. Pero nunca se pensó en caer en primera ronda.

La derrota es un varapalo no solo para Madrid y la propia candidatura sino también para la política española, para el Gobierno e incluso para el Príncipe Felipe, que se había volcado en su primera gran operación política de altura, la batalla por los Juegos. Así lo admitían en los pasillos miembros de la delegación del más alto nivel entre caras de desolación y lágrimas de los deportistas y voluntarios más jóvenes. Fue Don Felipe quien asumió la dura tarea de dar la cara después de la derrota y compareció visiblemente decepcionado en la misma sala en la que poco antes había hablado Rajoy para asumir el golpe.

 

Al presidente le preguntaron si habrá un cuarto intento de Madrid. “No está decidido ni me corresponde a mí decidirlo”, esquivó. Rajoy aseguró que esta derrota no tendrá consecuencias políticas para la alcaldesa de Madrid, por ejemplo, “como no lo tuvieron las derrotadas de 2005 y 2009”. Rajoy tampoco cree que este varapalo suponga un revés para el ánimo del país. “Los españoles han demostrado que tienen capacidad de superación y que se crecen frente a los retos difíciles”, contestó.

Don Felipe asumió que el resultado supone una “decepción” porque antes se había generado una “grandísima ilusión que no ha podido llegar a buen puerto”. Don Felipe trató de ver el lado positivo en medio de la desolación. “Un proyecto de esta envergadura ha unido a los españoles y esa es una gran herencia una lección que procuraremos mantener bien fuerte”.

En un contexto de profunda crisis de la política española, de pésima valoración del presidente del Gobierno y de caída en las encuestas de la monarquía, la alta política española se había tomado este tercer intento de Madrid como un posible salvavidas para darle la vuelta al ambiente político, social y económico en España. Fuentes del equipo económico de Rajoy señalaban que unos Juegos no suponen un gran ingreso real, un gran movimiento de capitales, entre otras cosas porque el 80% del trabajo ya estaba hecho. Sin embargo, sí creían que podrían cambiar el ambiente social y político. Y eso sí tiene consecuencias sobre la economía. “Estábamos necesitados de buenas noticias, llevamos demasiado tiempo sin tener ninguna”, insistían en el equipo de Rajoy.

El presidente y el Gobierno llevan semanas empeñados en dar la vuelta al ambiente pesimista que se respira por todas partes en España. El propio Ejecutivo admite que fue un error poner las cosas tan negras como hizo en abril, cuando anunció las perspectivas económicas. Ese intento de Rajoy se vio en su discurso en la candidatura, como es habitual en él todo en castellano —sigue inseguro en el inglés— y leído en papel de principio a fin. “España lidera el crecimiento de las exportaciones de la zona euro. Nuestra recuperación se produce con un histórico superávit por cuenta corriente. El año pasado tuvimos 58 millones de turistas y vamos a superarlo este año”, resumió.

 

Antes de conocer la derrota, el presidente había dejado claro ese interés político de una decisión así: “Los Juegos serían una muy buena noticia para los españoles, que han pasado momentos muy difíciles y que ahora ven la luz al final del túnel”. El fracaso y más en primera ronda es por tanto un varapalo notable que evita que Rajoy pueda tener una tregua en el ambiente político más tenso de la legislatura, con el caso Bárcenas en primer plano.

Pero casi más importante era esta cita para la Casa del Rey y para el Príncipe Felipe, que por primera vez sustituía a su padre en una cita tan relevante. Y a falta de Rajoy, que llegó a última hora a Buenos Aires porque tenía que estar en el G20, fue él quien hizo el trabajo de lobby para convencer a los delegados de que voten a Madrid. Don Felipe, mucho mejor valorado que su padre en las encuestas y con necesidad de huir del deterioro de imagen que supone el caso Urdangarin para la monarquía, demostró su capacidad política con los delegados y exhibió su dominio de los idiomas y de la escena en la presentación. Pero nada fue suficiente. La derrota pesa sobre todos, también sobre la política española.

CITA. EL PAÍS. O8-09-2013